Reseña: un mes probando el Xiaomi Redmi Note 12

Xiaomi se ha hecho famoso, desde que empezó a expandir su operación a Occidente en 2015, como el rey de la relación calidad-precio. Su modelo de negocio conlleva a que el precio de fabricación se maneje al mínimo que permita la cadena de suministros y esto favorece que el costo del celular sea hasta de la mitad de lo que vale algunas de las apuestas de la competencia en la misma gama.

Xiaomi es una compañía de origen chino que fue fundada en abril de 2010 por Lei Jun, un ingeniero electrónico y empresario de 53 años de edad, y Bin Li, otrora director de Ingeniería de Google a escala internacional. En tan solo 13 años se han consolidado como el tercer vendedor con mayor fuerza en el mercado global con una participación en el mercado del 13 %. Durante el primer trimestre de 2023 despacharon 30,5 millones de teléfonos en el mundo y solo son superados por Apple y Samsung.

El Xiaomi Redmi Note 12 es su apuesta por la gama media-baja, un segmento para aquellos que no quieren gastar más de 200 dólares en un teléfono móvil. En el papel, Xiaomi cumple con su promesa de ofrecer los mejores componentes posibles por el menor precio posible. Estas son sus especificaciones:

La versión que probamos en Crónicatech durante el último mes cuenta con 8 GB de RAM (+3 GB de RAM virtual), procesador Snapdragon 685 de ocho núcleos de hasta 2,80 GHz, Android 13 con capa de personalización MIUI 14y 128 GB de almacenamiento interno.

Un diseño elegante y resistente

Cuando se abre la caja del Xiaomi Redmi Note 12 encontramos elementos imprescindibles en su gama: además del teléfono, encontramos un cargador de 33 vatios (que destaca por ser bastante grande a decir verdad), una funda de plástico para protegerlo y los diferentes manuales de instrucciones y garantía.

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En términos de diseño el teléfono destaca por su elegancia y sobriedad. No es un dispositivo que despierte miradas por su originalidad estética, pero su verdadero encanto radica en los materiales de su construcción. En teléfonos de esa gama de precio es común encontrar cuerpos en plástico y poca protección a las caídas y las rayaduras. Xiaomi se saca de la manga una cara trasera de vidrio, un marco de aluminio y una cara frontal provista de Gorilla Glass 3. Este tipo de materiales son comunes en celulares de más de 400 dólares.

El teléfono pesa apenas 188 gramos. Es un peso común en la gama media, pero bastante más bajo que lo que encontramos en el segmento premium. Por ejemplo, el iPhone 14 Pro Max, que también tiene una pantalla de 6,7 pulgadas, pesa 240 gramos. Esa diferencia de 52 gramos se siente en el bolsillo.

Su grosor de 8 mm está en el promedio de la industria y es lo que cabe esperar de un dispositivo con una batería de gran tamaño (5000 mAh) como la que tiene el Xiaomi Redmi Note 12. En la cara trasera tiene tres lentes, dos grandes platos de color negro de 24 mm y uno más pequeño, de apenas 3 mm, para el macro. Vienen protegidos por una lámina de plástico. No tienes que gastar extra para proteger tu cámara, ese es un punto a favor. El módulo de fotografía no resalta en demasía, como ocurre con la mayoría de celulares en la actualidad. Si lo pones sobre una mesa no se va a tambalear.

El color azul de nuestro teléfono de pruebas no es mi color favorito, pero es un azul original con cierto aire futurista.

Si te gustan los audífonos tradicionales te tengo una buena noticia: este teléfono aún cuenta con un conector de 3,5 mm en la parte superior. El zócalo de la SIM se encuentra en el costado izquierdo y los botones de volumen y encendido se encuentran el lado derecho. El lector de huellas se encuentra ubicado en el botón de encendido.

La cámara frontal no ocupa más espacio del necesario -no hay ningún tipo de muesca o ‘notch’ y eso se agradece-. Los biseles son discretos y las bocinas ubicadas en la parte inferior son discretas. Es un teléfono cuyo diseño podría describirse como minimalista.

Su pantalla es AMOLED con 120 Hz de tasa de refresco. Es una combinación difícil de encontrar en la gama media donde suelen predominar las pantallas IPS LCD con máximo 90 Hz de refresco. No obstante, aunque en el papel su brillo máximo es de 1200 nits (en esta gama lo habitual es 900), en días soleados resulta difícil ver la pantalla si no subimos el brillo casi al máximo. La tasa de refresco deriva en buena fluidez, pero no al nivel de lo que vemos en teléfonos de gama más alta.

En general, el teléfono ofrece colores brillantes y negros más oscuros que los que vemos en una pantalla IPS, pero no se trata de una pantalla AMOLED de última generación. Hay un lado positivo de esto: no consume tanta batería como un panel de los que vemos en los gama alta de 2023.

El sensor de huellas ubicado en el costado derecho opera con normalidad y responde con rapidez al tacto.

Fotografía diurna con tonalidad natural

El Xiaomi Redmi Note 12 cuenta con tres sensores en su módulo de fotografía: uno principal de 48 MP, con apertura f/1,8 y con un tamaño de 1/1.4″ (es decir 4,5 mm) esto es alrededor de la mitad de lo que encontramos en un Galaxy Note 20 Ultra de hace tres años.

El sensor del Redmi Note 12 logra fotografías de buena calidad en condiciones de buena luz, con la peculiaridad de que los tonos y la temperatura de las imágenes usando el modo automático guardan significativa similitud con las que se pueden lograr con un iPhone. Para algunos, se trata de tonos apagados. Otros definen este manejo del color como “natural”. Ten el cuenta que el ‘smartphone’ de Xiaomi se queda corto cuando los objetos de nuestra toma se encuentran en movimiento porque su velocidad de obturación no es tan alta como la de los modelos de gama alta, pero es suficiente para captar de forma correcta a personas que están caminando sin que luzcan borrosas. Juzguen ustedes mismos:

Cuando se trata de selfis, el teléfono también logra buenos resultados. El lente delantero cuenta con un sensor de 13 MP y una apertura de f/2,5. También maneja la misma tonalidad “natural”. Por defecto, el teléfono tiene activado un filtro que suaviza la piel. A diferencia de otros dispositivos de la misma gama, se trata de un filtro suave que logra un resultado que no luce postizo.

El modo retrato de este teléfono es lo mejor que hemos probado en esta gama. En teléfonos del mismo rango solemos ver un modo retrato impreciso, donde el resultado se siente poco natural. En el caso del Xiaomi el resultado es mucho más similar al que encontramos en teléfonos de gama alta. Mi opción favorita es con desenfoque tenue, como vemos en la segunda fotografía (abajo). Sin embargo, el resultado con desenfoque al máximo también es óptimo.

Con desenfoque al máximo

Con desenfoque tenue

¿Cómo le va grabando video con buena luz?

El Xiaomi Redmi Note 12 tiene estabilizador de imagen. El lente, sin embargo, graba con cierto ‘ruido’ y la imagen carece de nitidez. Este video de TikTok fue grabado, en su totalidad, con la cámara trasera del Xiaomi:

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Fotos nocturnas de calidad aceptable

El Xiaomi Redmi Note 12 apenas logra una calificación aceptable en fotos nocturnas. Con respecto a otros teléfonos del mismo rango, logra fotografías muy oscuras y capta poca luz incluso con el modo noche. De hecho sorprende que con el modo nocturno la diferencia no es tan marcada como ocurre con otros modelos de la misma gama.

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Su deficiencia para captar luz se hace más evidente en entornos muy oscuros como el de la siguiente foto:

En cuanto a grabación de video en entornos oscuros, el teléfono hace una buena labor. La imagen no acusa ruido excesivo y el sonido se escucha con claridad. Este es un ejemplo:

Rendimiento superior para su gama

El Xiaomi Redmi Note 12 cuenta con un rendimiento superior a otros teléfonos de su gama gracias a que se encuentra potenciado por un Qualcomm Snapdragon 685 que solemos encontrar en teléfonos cuyo costo ronda los 400 dólares.

Para jugar títulos como Call of Duty Mobile es un teléfono competente. Aunque ejecuta el juego en calidad media, su panel de 120 Hz marca una gran diferencia a la hora de ejecutar movimientos rápidos gracias a que el tiempo de respuesta es fabuloso. Durante la partida, la temperatura del dispositivo no sube de forma significativa.

En el test de Geekbench obtiene resultados por encima de la media de la categoría. Por ejemplo, el Realme C55, equipado con un Mediatek, logró 100 puntos menos en la prueba de único núcleo, con 367 puntos, y 400 menos en la multinúcleo, con 1434 puntos.

En la prueba Wild Life de 3D Mark el Xiaomi Redmi Note 12 obtiene un resultado pobre con el que apenas supera al 10 % de los dispositivos que han ejecutado el test. Esto no implica que no se pueda jugar con él, como se puede ver en el caso de Call of Duty, pero sirve como registro de referencia para compararlo con futuros dispositivos de la misma gama. Lo cierto es que no es un móvil que permita jugar en calidad alta juegos de última generación, pero es lo que cabría esperar de un teléfono de este precio.

En la prueba de 3D obtiene resultados pobres.

En Geekbench está por encima de otros teléfonos de la misma gama.

Duración de batería excepcional

Aunque el Xiaomi Redmi Note 12 cuenta con un procesador potente para su gama e incorpora una pantalla AMOLED, logramos más de 53 horas de autonomía, es decir más de 2 días con uso intensivo. Su gestión de la batería de 5000 mAh es una de las mejores. El dispositivo cuenta con carga rápida. En alrededor de 40 minutos llega al 100 %.

En conclusión

El Xiaomi Redmi Note 12 cumple con su premisa de ofrecer un buen producto por un precio razonable. Es uno de los pocos teléfonos de esa gama con una pantalla AMOLED, su batería dura más de dos días y su rendimiento global es superior al de sus competidores directos. La cámara es su punto débil, en especial cuando se trata de tomar fotografías nocturnas. Sus fotos durante el día son de calidad razonable aunque, a mí, en lo personal no me gustan mucho sus tonos apagados, pero puede que a otros usuarios eso les resulte un aspecto positivo. Los 128 GB de almacenamiento se pueden quedar cortos muy rápido, Xiaomi debería pensar en lanzar una versión de 256 GB.