iPhone 16e: análisis de lo bueno, lo malo y lo feo

El iPhone 16e representa el cambio de estrategia de Apple para su oferta de entrada. Más que continuar con la línea SE, Apple ha rebautizado este dispositivo para alinearlo con el sistema de numeración de la generación actual, añadiendo el sufijo “e” para denotarlo como el modelo “económico” o de “entrada” en la familia iPhone 16.

Este dispositivo ha sido diseñado para ofrecer la experiencia esencial del iPhone a un precio más accesible mientras mantiene la compatibilidad con las últimas tecnologías de Apple, particularmente Apple Intelligence. Con un precio inicial de 709 euros en Europa, el iPhone 16e se posiciona como una alternativa interesante entre la gama media alta de smartphones, aunque con algunas concesiones notables que analizaremos en profundidad. Presentado oficialmente el 19 de febrero de 2025, este dispositivo redefine lo que significa ser un iPhone “esencial” en el ecosistema actual de la marca.

Diseño y pantalla: una evolución significativa

El diseño del iPhone 16e marca una separación significativa de los modelos de entrada anteriores. A diferencia de la línea iPhone SE que reciclaba diseños más antiguos con grandes biseles y el botón Home, el 16e adopta una estética más moderna con bordes planos, un marco de aluminio y una parte trasera de cristal mate.

El dispositivo está disponible en dos colores clásicos: negro y blanco. Este enfoque minimalista en la paleta de colores contrasta con las opciones más vibrantes de otros fabricantes, pero se mantiene fiel a la estética sobria que ha caracterizado a los modelos de entrada de Apple.

Con unas dimensiones de 14,67 cm × 7,15 cm × 0,78 cm y un peso de 167 g, el iPhone 16e es ligeramente más ligero que el iPhone 16 estándar. Incluye Face ID para la autenticación biométrica, abandonando por completo el sistema Touch ID que se encontraba en los modelos SE anteriores. El dispositivo también tiene clasificación IP68 para resistencia al agua y al polvo, ofreciendo una protección robusta contra los elementos.

Una adición notable es el botón de acción, que anteriormente era exclusivo de los modelos Pro. Este botón personalizable reemplaza el tradicional interruptor de silencio y puede configurarse para realizar diversas funciones según la preferencia del usuario. Es un detalle de diseño que aporta mayor versatilidad al dispositivo y que muchos usuarios agradecerán.

El iPhone 16e también adopta el USB-C, marcando la transición de Apple del puerto Lightning en toda su línea de iPhone. Sin embargo, es importante notar que esta es una implementación USB 2.0, que ofrece velocidades de transferencia de datos más lentas en comparación con los modelos de gama alta. Esta decisión ha sido criticada por muchos como un ahorro de costes innecesario en un dispositivo de este precio.

En cuanto a la pantalla, el iPhone 16e presenta un panel Super Retina XDR OLED de 6,1 pulgadas con una resolución de 2556 x 1179 píxeles y una densidad de 460 ppi. Esta pantalla ofrece una calidad de imagen excelente con colores vibrantes, negros profundos y un alto nivel de detalle. Compatible con HDR, True Tone y espacio de color P3, proporciona una experiencia visual premium que se mantiene a la altura de las expectativas de la marca.

Sin embargo, a diferencia de los modelos Pro y del iPhone 16 estándar, el iPhone 16e todavía presenta un notch en la parte superior de la pantalla en lugar de la Isla Dinámica. Este diseño refleja la estrategia de Apple de diferenciar sus niveles de producto, pero también sugiere la reutilización de componentes de generaciones anteriores para mantener un precio más bajo.

Además, mientras que el iPhone 16 puede alcanzar hasta 2.000 nits de brillo en exteriores, el 16e lo reduce a 800 nits (típico) y un pico de brillo de 1.200 nits para contenido HDR7. Esto significa que en condiciones de mucha luz, la visibilidad puede ser menor, aunque para la mayoría de los usuarios esto no representará un problema en el uso diario.

La pantalla también se queda con una tasa de refresco de 60 Hz, sin la tecnología ProMotion de 120 Hz que ofrecen los modelos Pro. Esta decisión de diseño es consistente con la estrategia de Apple para sus modelos estándar, pero cada vez resulta más difícil de justificar en 2025 cuando muchos smartphones de gama media ya ofrecen tasas de refresco más altas.

Rendimiento e inteligencia: potencia sin compromisos

En el corazón del iPhone 16e se encuentra el chip A18, el mismo procesador que se encuentra en los modelos estándar del iPhone 16, aunque con algunas reducciones modestas en potencia. El A18 en el iPhone 16e presenta una CPU de 6 núcleos y una GPU de 4 núcleos, en comparación con la GPU de 5 núcleos en el iPhone 16 estándar. A pesar de esta pequeña diferencia, el rendimiento sigue siendo impresionante.

El chip A18 viene acompañado de 8 GB de RAM, asegurando una multitarea fluida y preparando el dispositivo para futuras actualizaciones de software. Esta combinación ofrece un rendimiento ágil en todos los aspectos de la experiencia del usuario, desde el lanzamiento de aplicaciones hasta tareas de procesamiento complejas.

Los resultados de benchmark revelan números de rendimiento sólidos, con el iPhone 16e obteniendo 3235 en núcleo único y 8056 en pruebas multinúcleo en Geekbench. Curiosamente, estas puntuaciones son ligeramente superiores a las del modelo estándar iPhone 16, que obtuvo 3093 y 7553 respectivamente, aunque la diferencia no es sustancial.

El Neural Engine de 16 núcleos en el chip A18 es particularmente importante ya que habilita Apple Intelligence, el sistema de IA de la compañía que debuta con iOS 18. Esto asegura que el iPhone 16e pueda manejar tareas avanzadas como transcripción de voz en tiempo real, mejoras en fotografía computacional y sugerencias inteligentes dentro del sistema operativo.

Según los informes, Apple Intelligence estará disponible para abril de 2025, y las pruebas beta iniciales sugieren que el iPhone 16e maneja estas funciones de IA tan capazmente como sus hermanos más caros. El dispositivo procesa imágenes de Image Playground localmente con agilidad y responde sin limitaciones a pesar de ser considerado un modelo “esencial”.

Las mejoras de rendimiento son significativas en comparación con los modelos de entrada anteriores. La CPU del iPhone 16e es aproximadamente un 40% más rápida que la del iPhone SE 3 y un 50% más rápida que la del iPhone 12. De manera similar, la GPU ofrece ganancias de rendimiento del 40% sobre el iPhone SE 3 y del 60% sobre el iPhone 12.

La experiencia de software es fluida y receptiva, con iOS 18 funcionando sin problemas en el dispositivo. Las aplicaciones se abren rápidamente, las transiciones son suaves y no hay retrasos o tartamudeos perceptibles incluso durante tareas intensivas. Este nivel de rendimiento asegura que el iPhone 16e permanecerá capaz durante varios años de actualizaciones de iOS, lo que es particularmente importante para un dispositivo que probablemente muchos usuarios mantendrán durante 4-5 años o más.

Como señala Jablickar, “sin importar cómo lucieran los iPhone SE, siempre ofrecían el máximo rendimiento posible. Es por eso que el iPhone 16e aplasta al resto de la gama media Android“. Esta consistencia en el rendimiento ha sido siempre una fortaleza de los modelos de entrada de Apple, y el 16e no es una excepción.

Cámara: calidad singular frente a versatilidad

El sistema de cámara es donde Apple ha tomado una de sus decisiones más controvertidas con el iPhone 16e. A diferencia de prácticamente todos los smartphones modernos en este rango de precio, el iPhone 16e presenta una única cámara trasera. Sin embargo, Apple ha elegido calidad sobre cantidad al implementar una cámara Fusion de 48MP capaz de ofrecer resultados impresionantes.

Esta cámara principal produce excelentes fotos con colores vibrantes, buen rango dinámico y alto detalle. El mayor tamaño del sensor en comparación con los iPhones de entrada anteriores permite un mejor rendimiento con poca luz y efectos de profundidad de campo más naturales.

Una de las implementaciones inteligentes en este sistema de cámara única es el zoom óptico de calidad 2x. Al utilizar la porción central del sensor de 48MP, el iPhone 16e puede producir imágenes de 12MP con un zoom 2x que mantiene el nivel de calidad del zoom óptico. Esto compensa parcialmente la falta de un teleobjetivo dedicado.

La cámara frontal es un sensor de 12MP que ofrece un rendimiento sólido para selfies y videollamadas. Es compatible con el modo Retrato con bokeh avanzado y control de profundidad, así como con las funciones Animoji y Memoji.

Las capacidades de video en el iPhone 16e son robustas, con soporte para grabación en 4K a hasta 60fps. El dispositivo también incluye el modo cinemático de Apple para crear videos con transiciones automáticas de enfoque entre sujetos.

Si bien el sistema de cámara es capaz, la ausencia de un lente ultra gran angular es notable. Esta omisión limita la versatilidad del sistema de cámara, impidiendo a los usuarios capturar paisajes expansivos, fotos arquitectónicas o grandes grupos sin una distancia significativa. Para muchos usuarios, particularmente aquellos que valoran la versatilidad fotográfica, esto podría ser un factor decisivo negativo.

Las funciones de fotografía computacional mitigan parcialmente esta limitación. Con iOS 18 y el Neural Engine en el chip A18, el iPhone 16e ofrece capacidades avanzadas de procesamiento de imágenes que mejoran las fotos en condiciones desafiantes. Funciones como Smart HDR, Deep Fusion y Estilos Fotográficos están presentes, asegurando que las fotos tomadas con el iPhone 16e se vean geniales directamente desde la cámara.

Como señala en su análisis La Vanguardia: “el iPhone 16e solo tiene dos grandes fallos”, y uno de ellos es precisamente esta limitación en la versatilidad fotográfica, que en 2025 resulta difícil de justificar en un dispositivo de más de 700 euros.

Batería y la innovación C1: autonomía sobresaliente

Quizás el aspecto más impresionante del iPhone 16e es su duración de batería. A pesar de tener un factor de forma relativamente compacto de 6,1 pulgadas, que históricamente ha resultado en una menor duración de la batería en comparación con iPhones más grandes, el 16e ofrece una resistencia excepcional.

Según las métricas de Apple, el iPhone 16e puede reproducir video durante hasta 26 horas, una mejora significativa sobre las 20 horas del iPhone 15 en condiciones similares1. Esta mejora proviene de una combinación de factores: una capacidad de batería físicamente mayor, la eficiencia energética del chip A18 y, quizás lo más importante, la introducción del módem C1.

El chip C1 es el primer módem celular diseñado internamente por Apple utilizando la tecnología Apple Silicon. Este nuevo componente ofrece mejor eficiencia energética en comparación con los módems de terceros que Apple ha utilizado anteriormente. El C1 es particularmente efectivo en la gestión de conexiones en áreas con cobertura deficiente, donde los smartphones normalmente consumen más energía tratando de mantener la conectividad.

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Los usuarios han reportado un impresionante rendimiento de batería en el mundo real, con el dispositivo a menudo conservando más del 60% de carga después de 12-14 horas de uso intensivo1. Esto marca una mejora significativa sobre los iPhones de 6,1 pulgadas anteriores, abordando una de las quejas más comunes sobre los modelos de iPhone más pequeños.

El módem C1 no solo contribuye a una mejor duración de la batería sino que también optimiza la conectividad. Maneja las transiciones entre redes 5G y LTE de manera más eficiente, reduciendo el impacto energético de estas transiciones. Los usuarios que viajan por áreas con cobertura variable han notado el rendimiento mejorado en mantener una conexión estable sin un drenaje significativo de la batería.

Como señala Wired en su reseña: “Teniendo en cuenta que se trata de un iPhone de 6.1 pulgadas, que históricamente obtienen los peores resultados en las pruebas de batería, es una grata sorpresa”. Esta mejora en la autonomía es posiblemente uno de los argumentos más sólidos a favor del iPhone 16e, especialmente para usuarios que priorizan la duración de la batería sobre otras características.

Las opciones de carga incluyen carga por cable vía USB-C y carga inalámbrica. Sin embargo, una omisión notable es la compatibilidad con MagSafe. A pesar de tener capacidades de carga inalámbrica, el iPhone 16e carece del sistema de alineación magnética introducido con la serie iPhone 12, lo que significa que los usuarios no pueden aprovechar el creciente ecosistema de accesorios MagSafe. Esta ausencia resulta particularmente desconcertante considerando que MagSafe ha estado presente en los iPhones desde 2020.

Propuesta de valor: lo bueno, lo malo y lo feo

El iPhone 16e presenta una propuesta de valor compleja que requiere una cuidadosa consideración de sus fortalezas y debilidades frente a su punto de precio.

Comenzando a 709 euros en Europa (o 599 dólares en EE.UU.), el iPhone 16e se posiciona como el iPhone nuevo más asequible de Apple. Sin embargo, este precio es significativamente más alto que los modelos de entrada anteriores como el iPhone SE 3, mientras que ofrece un descuento más modesto en comparación con el iPhone 16 estándar, que comienza en 885 euros en España.

Los aspectos buenos del iPhone 16e son sustanciales. El chip A18 ofrece un rendimiento de nivel insignia, asegurando que el dispositivo permanecerá capaz durante años de actualizaciones de iOS. La mejorada duración de la batería aborda un punto de dolor clave de los iPhones más pequeños. La cámara, aunque limitada a un solo lente, produce excelentes fotos con asistencia computacional. El diseño moderno es una actualización bienvenida de la estética anticuada de la línea SE.

Quizás lo más importante, el iPhone 16e ofrece compatibilidad total con Apple Intelligence, convirtiéndolo en el punto de entrada más asequible al ecosistema de IA de Apple. Para los usuarios que quieren experimentar estas nuevas funciones sin pagar precios premium, el 16e representa la barrera de entrada más baja.

Los aspectos malos, sin embargo, no pueden pasarse por alto. La pantalla, aunque de alta calidad, carece de la tecnología ProMotion de 120Hz que se encuentra en los modelos de gama alta y tiene un brillo máximo inferior. El sistema de cámara única, independientemente de su calidad, carece de la versatilidad de las configuraciones multicámara que se encuentran en alternativas Android de precio similar. El puerto USB-C está limitado a velocidades USB 2.0, lo que se siente anticuado en 2025.

La ausencia de compatibilidad con MagSafe es particularmente desconcertante, ya que esta tecnología ha estado presente en los iPhones desde la serie iPhone 12. Sin ella, los usuarios se pierden la conveniencia de la alineación magnética para la carga inalámbrica y el creciente ecosistema de accesorios MagSafe.

Los aspectos feos giran principalmente en torno a las decisiones estratégicas de Apple. El punto de precio más alto en comparación con los modelos de entrada anteriores plantea preguntas sobre el posicionamiento del dispositivo. Algunos críticos han sugerido que Apple está esencialmente reempaquetando componentes de modelos más antiguos (como el iPhone 14) con un nuevo procesador y cobrando una prima por ello5.

El iPhone 16e también crea una línea de productos más confusa. Con el abandono de la marca SE pero manteniendo esencialmente el mismo concepto, los clientes potenciales podrían tener dificultades para entender dónde encaja este dispositivo en el ecosistema de Apple y si representa un buen valor en comparación con modelos ligeramente más antiguos como el iPhone 15, que pueden estar disponibles a precios similares a través de descuentos y promociones.

Para ciertos usuarios, particularmente aquellos que actualizan desde iPhones mucho más antiguos como el iPhone 8 o iPhone X, el iPhone 16e representa una actualización sustancial con características y diseño modernos. Sin embargo, los consumidores conocedores de tecnología podrían encontrar mejor valor ya sea subiendo al iPhone 16 estándar o considerando insignias de generaciones anteriores a precios reducidos.

El argumento más convincente para el iPhone 16e es su valor a largo plazo. Con potencia de procesamiento de nivel insignia y actualizaciones de software garantizadas durante muchos años, el dispositivo podría resultar económico durante un período de propiedad de 5-7 años. Sin embargo, limitaciones como la cámara única y la falta de MagSafe permanecerán durante ese período, potencialmente causando arrepentimiento del comprador a medida que estas características se vuelven cada vez más estándar en el ecosistema de smartphones.

En conclusión, el iPhone 16e representa el enfoque redefinido de Apple para dispositivos de entrada. En lugar de ofrecer una experiencia drásticamente reducida, Apple ha creado un dispositivo que mantiene fortalezas centrales en rendimiento y longevidad mientras hace compromisos calculados en áreas que pueden afectar a algunos usuarios más que a otros. Si vale el precio solicitado dependerá en gran medida de las prioridades individuales y de cuánto valor se pone en el ecosistema de Apple y el soporte de software a largo plazo.