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¿Cómo afectará la IA el trabajo? Conoce la visión de los optimistas

Un notable 90 % de los futuristas encuestados por TCS se muestran optimistas respecto a los cambios que traerá la IA.

El reciente informe “Trabajando hacia el futuro”, elaborado por el equipo Future of Business de Tata Consultancy Services (TCS), ofrece un análisis exhaustivo sobre el impacto de la inteligencia artificial, incluida la IA Generativa, en el panorama laboral mundial. Este estudio, basado en una encuesta a destacados futuristas y expertos en diversas disciplinas, proporciona una visión profunda y perspicaz sobre las tendencias que moldearán el futuro del trabajo en los próximos años.

Los hallazgos sobre el futuro del trabajo revelan un consenso generalmente optimista entre los futuristas sobre el impacto de la inteligencia artificial (IA) en nuestras vidas laborales. Se anticipa que la IA mejorará significativamente la experiencia laboral, conduciendo a semanas de trabajo más cortas, carreras más fluidas, el surgimiento de terapeutas AI, trabajo híbrido/remoto en roles previamente imposibles, y otros beneficios novedosos. Un notable 90 % de los futuristas encuestados se muestran optimistas respecto a estos cambios, con casi la mitad (40 %) muy optimistas sobre el potencial de la IA para contribuir positivamente a la salud y bienestar de los trabajadores.

La IA ya está impactando en el ámbito empresarial y se espera que su adopción en 2024 transforme muchos roles laborales. Se prevé la creación de nuevos tipos de empleos de nivel de entrada, una transformación en cómo las compañías realizan la capacitación y reciclaje de habilidades, y una mayor seguridad en trabajos físicamente demandantes o peligrosos. Además, se anticipa que la IA proporcionará a todos los trabajadores, desde los de nivel de entrada hasta los CEO y fundadores de pequeñas empresas, un acceso igualitario a la información y capacidades, democratizando el trabajo estratégico y creativo para organizaciones de todos los tamaños y empleados de todos los niveles de habilidad.

Se espera un impacto significativo en las pequeñas empresas, con un 75 % de los encuestados previendo que la adopción de la IA permitirá a estas empresas expandirse a nuevos mercados y alcanzar una base de clientes más amplia. Además, un 60 % de los futuristas encuestados anticipan que las compañías proporcionarán IA a los empleados, mientras que un 40 % prevé un modelo de “Trae tu propia IA” (BYOAI). La IA se considera un igualador de condiciones, potenciando el compromiso, la ideación y la innovación de los empleados en todos los niveles.

Desde una perspectiva de la industria, se espera que los campos de marketing y comunicaciones experimenten la transformación liderada por IA más temprana, seguidos por la salud y la educación, los servicios bancarios y financieros, y el desarrollo de TI y software. El éxito de la transformación industrial dependerá de diversos factores, pero las industrias que se beneficiarán más serán aquellas que abracen la capacidad de la IA para permitir a los trabajadores concentrarse en tareas más humanas, creativas y estratégicas.

¿Qué es el optimismo tecnológico con la IA?

En el horizonte de la innovación tecnológica, el optimismo tecnológico se erige como una corriente de pensamiento cada vez más predominante entre aquellos que se dedican a anticipar y moldear el futuro de nuestras sociedades. Esta postura, sostenida por un notable 90 % de los futuristas encuestados, se cimenta en la convicción de que los avances en inteligencia artificial (IA) no solo reconfigurarán nuestras esferas laborales para mejor, sino que también jugarán un papel crucial en la mejora del bienestar y la salud de los empleados. Tal es la confianza en el potencial benéfico de la IA que casi la mitad de estos visionarios se declara muy optimista respecto a los cambios que esta tecnología promete traer.

El papel de los futuristas, aquellos individuos y profesionales dedicados a explorar y predecir posibles futuros, es fundamental en el contexto empresarial contemporáneo. Estos visionarios se esfuerzan por anticipar y preparar a las compañías para las transformaciones que podrían avecinarse, liderando a menudo el diálogo sobre las tendencias tecnológicas emergentes. En este escenario, la IA y, más específicamente, la IA Generativa, ocupan un lugar central, suscitando tanto entusiasmo como inquietudes. No obstante, a través de un análisis detallado de los resultados de recientes encuestas y estudios, emerge una inclinación general hacia el optimismo sobre el impacto futuro de la IA en el mundo laboral.

Lee también: Datos clave de la adopción de inteligencia artificial (IA) en América Latina en 2024

Es importante destacar que el optimismo no ha sido siempre la tónica dominante entre los futuristas. Tradicionalmente, su labor ha requerido balancear el optimismo tecnológico —la creencia en la capacidad de la tecnología para mejorar continuamente y enriquecer las vidas humanas, contribuyendo a un mundo mejor— con el pesimismo tecnológico —la perspectiva que considera que las nuevas tecnologías pueden generar tantos o más problemas de los que resuelven. Esta dualidad refleja la complejidad de la relación entre la humanidad y sus creaciones tecnológicas, invitando a un debate continuo y crítico sobre el verdadero impacto de la tecnología en la sociedad.

En este contexto, se plantea a menudo la pregunta sobre si la tecnología representa la solución a los problemas sociales amplios, interrogante al que las respuestas tienden a ser mayoritariamente positivas y han mostrado un incremento en el optimismo a lo largo del tiempo. Por ejemplo, en sondeos informales realizados en 2016, aproximadamente el 43% de los participantes expresaron una perspectiva positiva sobre el impacto de la tecnología, cifra que ha aumentado en un 10% en años recientes.

¿La IA ayudará al trabajo en el futuro?

Esta tendencia hacia el optimismo tecnológico se manifiesta con especial fuerza en el ámbito laboral. Los futuristas ven en la IA y otras tecnologías emergentes la clave para superar los desafíos actuales del mundo del trabajo, tales como la falta de compromiso, el desequilibrio entre la vida laboral y personal, y la desigualdad. Los resultados de encuestas enfocadas específicamente en la IA y el trabajo respaldan esta visión: un 90% de los futuristas encuestados se muestra optimista sobre los cambios que la IA introducirá en nuestras formas de trabajar, con casi la mitad de ellos manifestando un alto grado de optimismo. Este panorama sugiere que, para los futuristas, el impacto positivo de la tecnología en el trabajo es un aspecto particularmente prometedor, incluso más allá de las implicaciones más amplias de la tecnología para el futuro.

Así, el optimismo tecnológico no solo refleja una fe en el potencial transformador de la IA, sino que también evidencia una visión compartida sobre el futuro del trabajo; un futuro en el que la colaboración entre humanos y máquinas potencia la creatividad, la eficiencia y el bienestar general, abriendo camino a una era de progreso y bienestar colectivo sin precedentes.

El optimismo respecto al futuro del trabajo y el rol de la inteligencia artificial (IA) parece fundamentarse en la creencia de que la IA tiene el potencial de transformar el trabajo en algo que haga a las personas más felices, interesadas y apasionadas. Hay un consenso en que el trabajo, tal como lo conocemos, experimentará una transformación significativa: algunos empleos serán creados mientras que otros desaparecerán. Aunque existen preocupaciones, una mirada histórica sugiere que estos desafíos se superarán, recordando que los periodos de gran invención suelen tener efectos tanto constructivos como destructivos. Por tanto, recae en la sociedad la responsabilidad de mitigar los riesgos mientras se habilitan aquellas innovaciones que promueven el desarrollo humano.

Al examinar cómo el trabajo se transformará de manera positiva para los humanos en el futuro, los futuristas identifican áreas clave, incluyendo el papel de la IA como potenciador del bienestar físico y mental de los trabajadores. Aproximadamente el 72 % de los participantes ven a la IA haciendo contribuciones significativamente positivas a la salud y el bienestar de los empleados. Ya existen aplicaciones empresariales que ayudan a los empleados a auto-monitorearse y gestionar el estrés y la mentalidad. A medida que estas aplicaciones aumentan en funcionalidad y popularidad, serán adoptadas cada vez más por las empresas como un beneficio para los empleados. Un asistente de IA dedicado al bienestar laboral podría ofrecer guía sobre mantenimiento de la salud, hidratación y pausas durante la jornada laboral. Mirando hacia el futuro, un asistente de IA podría incluso monitorizar el tono de voz durante una llamada de conferencia, identificar el estrés y recomendar un paseo de 15 minutos después.

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En cuanto a la autonomía y nuevas formas de trabajar, existe una clara expectativa de que comenzaremos a trabajar de maneras diferentes y por diferentes razones gracias a la IA. Casi el 90 % de los encuestados se muestran optimistas respecto a que los empleados alcanzarán una mayor autonomía y flexibilidad en cómo trabajan gracias a los beneficios de la IA. Aunque el mundo ya ha experimentado una transformación hacia el trabajo híbrido y remoto en el mundo pospandemia, el 70% de los encuestados ve esta tendencia continuando, ya que la IA habilitará trabajos que anteriormente solo podían realizarse en el sitio para ser híbridos o remotos en el futuro. Esto se alineará con avances continuos en IA para cambiar aún más el enfoque gerencial hacia indicadores de rendimiento a lo largo del tiempo en ciertos tipos de negocios.

Los hallazgos discutidos apoyan la posibilidad de implementar una semana laboral de cuatro días, tema que ha captado atención generalizada en años recientes. Sin embargo, existe división de opiniones entre los expertos sobre esta cuestión. Aunque la mayoría anticipa que la IA podría reducir el tiempo de trabajo, muchos se mostraron escépticos respecto a la probabilidad de que las empresas lo implementen oficialmente. Similar a la creación del fin de semana de dos días, podría requerirse una presión social y gubernamental significativa para lograr este cambio.

Hay varias razones para ser optimistas acerca del rumbo que está tomando la tecnología, especialmente en lo que respecta a la IA y el trabajo. En las primeras décadas del siglo XX, vivimos una transformación similar con la introducción de nuevas tecnologías como la fuerza de vapor y filosofías de trabajo como las líneas de ensamblaje, que desafiaron el statu quo, resultando en una mayor productividad pero también en nuevos derechos para los trabajadores y una mejor calidad de vida para muchos. Según el consenso de prominentes futuristas mencionados en este reporte, se espera que la IA tenga un impacto disruptivo pero netamente positivo.

IA Ambiental: la integración de la IA en el trabajo

La integración de la Inteligencia Artificial (IA) en el lugar de trabajo está experimentando un cambio transformador hacia lo que se denomina “IA Ambiental”. Esta noción se refiere a la IA como una capacidad omnipresente y perfectamente integrada en las actividades laborales cotidianas, marcando su presencia a través de herramientas comunes como el correo electrónico, los calendarios y el software de chat, evolucionando y aprendiendo en segundo plano sin ser intrusiva.

La IA Ambiental promete redefinir los trabajos de nivel de entrada hacia roles más sofisticados y estimulantes intelectualmente, actuando como un “multiplicador de fuerza” que permite a los empleados nuevos superar su falta de experiencia. Sin embargo, este avance podría generar conflictos, especialmente con los mandos intermedios que no contaron con esta ventaja en las etapas iniciales de sus carreras, posiblemente creando resentimiento por el rápido ascenso de los trabajadores más jóvenes.

La actualización y requalificación de los empleados es esencial en esta era de la IA, facilitando la adquisición rápida de habilidades y la adaptación a nuevas roles y tecnologías. La IA Ambiental podría ser particularmente transformadora en industrias de rápido cambio o donde la automatización reemplace el trabajo manual.

En cuanto a los trabajos físicamente exigentes o peligrosos, la IA se ve como una herramienta de aumentación y mejora de la seguridad, pudiendo monitorizar entornos de trabajo para identificar potenciales peligros y automatizar tareas peligrosas para reducir riesgos. Se anticipa que, eventualmente, la mayoría de estos trabajos serán realizados por robots potenciados por IA, aunque esto podría tardar años debido a la complejidad de las tareas involucradas.

La IA Ambiental representa un cambio de paradigma significativo en el lugar de trabajo, extendiendo su potencial más allá de la simple automatización hacia oportunidades para mejorar la eficiencia, seguridad y satisfacción laboral. El desafío para las organizaciones será aprovechar esta tecnología de manera que mejore la eficiencia operativa y la productividad, al mismo tiempo que empodera a los empleados, fomentando un ambiente de aprendizaje continuo, creatividad e innovación. La integración de la IA Ambiental en el lugar de trabajo no es solo una revolución tecnológica, sino también un catalizador para una evolución más amplia en la forma en que se entiende, organiza y valora el trabajo.

Un asistente basado en IA para cada trabajador

Actualmente, vivimos en una era en la que la inteligencia artificial (IA) se ha erigido como una fuerza transformadora, redefiniendo nuestros entornos laborales. Los resultados recientes de encuestas entre futuristas y líderes empresariales indican una expectativa de que la IA pasará rápidamente de ser una herramienta novedosa a convertirse en un colaborador autónomo, similar a un compañero de trabajo.

Impacto en las pequeñas empresas: La integración de la IA en el ámbito laboral se está acelerando, pasando de ser una visión a una realidad actual. La IA, capaz de entender el contexto y ejecutar una amplia gama de tareas, ya está moldeando nuestros lugares de trabajo y pronto podrá apoyar operaciones autónomas a través de GPTs y plataformas de software de terceros. Esta evolución se espera que iguale las condiciones de competencia en los negocios, democratizando las operaciones empresariales y permitiendo que equipos y organizaciones pequeñas y medianas operen con la eficiencia y creatividad antes exclusivas de las grandes organizaciones. De hecho, el 75 % de los encuestados anticipa que la adopción de la IA permitirá a las pequeñas empresas expandirse a nuevos mercados y alcanzar una base de clientes más amplia.

IA en la experiencia laboral diaria: La colaboración humana-IA emergente es efectiva en generar chispas de creatividad e imaginación, habilitando el descubrimiento de nuevos patrones, tendencias e ideas. Esta colaboración facilita la exploración de nuevos caminos y proporciona los recursos necesarios para seguirlos.

En cuanto a la organización de los asistentes de IA, no hay consenso sobre cómo se gestionará exactamente. Un 60% de los futuristas anticipa que las compañías asumirán la responsabilidad, mientras que un 40 % prevé un modelo de “Trae tu Propia IA” (BYOAI).

Asistente de IA vs. compañero de trabajo: Actualmente, la colaboración humano-IA parece centrarse más en los humanos dirigiendo a la IA para completar tareas definidas. Sin embargo, no pasará mucho tiempo antes de que la IA avance de ser una herramienta pasiva a un compañero de trabajo activo que conoce nuestras rutinas y trabajos, transformándose en colaboradores autónomos plenamente comprometidos.

A medida que los asistentes de IA evolucionen a verdaderos compañeros de trabajo autónomos, veremos una transformación adicional de la experiencia laboral y de las estructuras organizacionales. La IA democratizará el lugar de trabajo, nivelando el campo de juego al proporcionar a todos los trabajadores, desde los de nivel de entrada hasta los CEO, igual acceso a la información y capacidades públicas, lo que conducirá a niveles más altos de compromiso, ideación e innovación en todos los niveles. Esto podría implicar que las estructuras jerárquicas tradicionales necesiten cambiar para acomodar la autonomía mejorada que la IA podría introducir, conduciendo a entornos de trabajo menos orientados al control y más a la colaboración.

IA impactará a todos los sectores tecnológicos

La inteligencia artificial (IA) se encuentra en el centro de una mezcla de anticipación y controversia, emergiendo como una fuerza transformadora que remodela nuestros lugares de trabajo. La adopción empresarial de la IA Generativa, que pasó rápidamente de ser una herramienta novedosa a un colaborador autónomo, plantea la pregunta sobre su futuro impacto y las industrias que transformará primero.

Lee también: Oracle: así está implementado IA generativa en 2024

Históricamente, la adopción de IA se ha justificado por las ganancias en productividad que promete. Sin embargo, esta vez el impacto podría ser más centrado en lo humano, beneficiando al trabajador al hacer el trabajo más eficiente, seguro y satisfactorio. Las industrias ricas en datos y con afinidad tecnológica serán las primeras en experimentar resultados positivos.

Los futuristas consultados sitúan a los campos de marketing y comunicaciones en primer lugar para experimentar esta transformación positiva, seguidos por la salud y educación, servicios financieros y bancarios, y desarrollo de IT y software. La IA transformará estas industrias de maneras únicas pero interconectadas, desde automatizar la creación de contenido y mejorar la personalización en marketing hasta potenciar experiencias positivas de cliente en banca.

En salud y educación, se espera que la IA compense las carencias de personal, permitiendo a los profesionales centrarse en potenciar el talento humano. La promesa va más allá de la eficiencia operativa; invita a un enfoque de atención personalizada y reduce la carga administrativa, siendo un diferenciador crucial para los negocios de salud.

En IT y desarrollo de software, la IA ya impacta a través de AIOps, automatizando centros de datos y resolviendo problemas más rápidamente. La implementación de IA Generativa impulsará a los profesionales de la tecnología a desarrollar un entendimiento básico de otras funciones empresariales, democratizando el acceso a la tecnología mientras se mantiene la necesidad de supervisión humana y aplicación estratégica.

Finalmente, la IA tendrá el mayor impacto en industrias donde permita a los humanos lograr lo que antes no podían, eliminando barreras de escala y complejidad. Las industrias que aprovechen este potencial y se enfoquen en potenciar el talento humano verán a sus trabajadores prosperar con satisfacción personal y laboral.

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El autor

Edgar Medina es el fundador de Crónicatech. Ha escrito para medios reconocidos como El Tiempo, revista Donjuán, Portafolio, La República, revista Semana y Canal RCN. Ha trabajado en marketing digital con candidatos presidenciales, entidades del sector público como Icetex y la Alcaldía de Bogotá.
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