Cuando en el corazón del invierno moscovita del año pasado los expertos pronosticaron que el jaque más duro no vendría de la lejana Ucrania sino del propio tablero político interno ruso, muchos se negaron a creerlo. Pero la historia, caprichosa como es, ya nos ha enseñado a más de uno que el ruido de los sables a menudo precede a la inquietud en los palacios.
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La guerra en Ucrania, predecible en sus resultados desde el principio, fue una apuesta fallida de Rusia. Apostaron a la conquista rápida, a una guerra relámpago que les daría todo Ucrania en una semana. Pero los días se volvieron meses, y la victoria rápida se transformó en un conflicto largo y desgastante. Hoy, la imagen es la de un gigante herido, lamiendo sus heridas mientras trata de mantener su frente en alto.
Muchos nostálgicos del antiguo esplendor soviético se apresuran a negar la evidencia de un estado en crisis. Hay quienes se niegan a ver los signos de un golpe de Estado en ciernes, y prefieren asumir una visión simplista de las complejidades del ajedrez geopolítico.
Pero hablemos de realidades. En un principio, la conquista de Ucrania era cuestión de días. Luego, meses. La perspectiva de la guerra fue cambiando hasta que la mirada se centró en una única ciudad: Bakhmut. Tras un año de conflicto, el objetivo de la totalidad de Ucrania se había reducido a esa sola ciudad. Y aún así, Bakhmut resistió.
En cuestión de semanas, el guion cambió. Ahora se hablaba no de la conquista rusa, sino de la eficacia de una contraofensiva ucraniana. Y aunque muchos prorusos negaban el éxito de dicha estrategia, la realidad era evidente: la supuesta invencibilidad rusa se había roto en Bakhmut.
Pero no todas las fuerzas en el tablero ruso eran iguales. Había un grupo que destacaba: las milicias Wagner, un grupo de mercenarios altamente entrenados bajo el mando de Yevgueni Prigozhin. Estos mercenarios se destacaban por su disciplina y equipamiento superior, siendo un dolor de cabeza constante para las fuerzas ucranianas. El éxito de las milicias Wagner hizo que Prigozhin se ganara el favor de Putin, algo que desató la envidia y rivalidad con los altos mandos militares rusos.
Prigozhin se convirtió en un estorbo para los generales rusos. La tensión entre Prigozhin y los altos mandos militares rusos no tardó en estallar. Prigozhin, frustrado por la falta de apoyo en suministros, anunció que las milicias Wagner se retirarían del conflicto, dejando a las ya mermadas tropas regulares rusas en una posición comprometida.
La respuesta del mando militar ruso no se hizo esperar. Con el apoyo de Putin, se emitió una orden exigiendo que todos los grupos paramilitares, incluyendo a las milicias Wagner, pasaran a estar bajo el mando único del ejército ruso. La negativa de Prigozhin no tardó en llegar, desatando una serie de conflictos que culminaron en el bombardeo de un campamento de las milicias Wagner por parte de las propias fuerzas rusas.
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Esto llevó a Prigozhin a declararse en rebelión abierta contra el “mando militar corrupto”, e inició una marcha hacia Moscú con el objetivo de destituir a los altos mandos militares rusos. Este desafío al poder central ha llevado a muchos a hablar de un golpe de estado en proceso, una posibilidad que parece cada vez más plausible.
“El éxito o fracaso de Prigozhin en esta empresa es incierto. Si bien las milicias Wagner son una fuerza formidable, enfrentarse a todo el ejército ruso es una empresa titánica”, así lo explica el analista e historiador Irving Gatell. Pero en cualquier caso, el daño ya está hecho. Esta división en el interior de Rusia sentencia de facto el conflicto en Ucrania.
Si Prigozhin gana, es probable que Putin pierda el poder. Si Prigozhin pierde, el coste para Rusia será enorme, y la guerra en Ucrania estará perdida de todas formas. Sin las milicias Wagner, el ejército ruso no tiene capacidad para contener la contraofensiva ucraniana.
En conclusión, este conflicto interno, ya sea que se materialice como un golpe de estado o no, representa un colapso severo para Rusia y acaba con cualquier posibilidad de victoria en Ucrania. Es un golpe brutal que podría desencadenar un cambio histórico, transformando el escenario geopolítico del siglo XXI. Ahora, la verdadera guerra de Rusia no es por Ucrania, sino por mantener su propia integridad como nación.
A las 2 de la tarde, hora de Colombia, Prigozhin detuvo el avance de las milicias hacia Moscu para “evitar derramamiento de sangre”. Por el momento, el conflicto bélico ha cesado producto de un acuerdo con el gobierno ruso.
Preguntas y respuestas
¿Qué está pasando hoy en Rusia?
Hoy, Rusia está enfrentando una serie de desafíos internos significativos. El líder del Grupo Wagner, Yevgeny Prigozhin, ha incitado una rebelión armada y está dirigiendo a sus tropas hacia Moscú. El Grupo Wagner, un ejército privado de mercenarios que ha estado luchando del lado del ejército ruso desde el inicio de la invasión de Ucrania, ha tomado la capital de la región rusa de Rostov del Don, un enclave importante y un centro logístico para el ejército ruso.
¿Cómo ha reaccionado el gobierno ruso a esta rebelión?
El presidente ruso Vladimir Putin ha calificado la acción de Prigozhin como una “puñalada por la espalda por ambición personal”. Putin ha admitido que Rusia se enfrenta a un motín armado y que sus fuerzas ya no controlan Rostov del Don. Ha acusado al jefe del Grupo Wagner de traición y ha amenazado con una dura respuesta, según la BBC. El gobierno ruso ha asegurado que Putin permanece en Moscú, a pesar de que el avión presidencial abandonó la ciudad.
¿Cómo se están preparando las ciudades rusas para esta rebelión?
En Moscú, el alcalde Sergei Sobyanin ha declarado un régimen de operaciones antiterroristas y ha pedido a los ciudadanos que se abstengan de viajar por la ciudad tanto como sea posible. Se han visto vehículos blindados en las calles y se han introducido controles adicionales en las carreteras1. En la ciudad rusa de San Petersburgo, la policía antidisturbios y la guardia nacional han llevado a cabo redadas en la oficina del Grupo Wagner.
¿Qué ha llevado a esta rebelión armada?
En los últimos meses, Prigozhin acusó repetidamente al ministro de defensa de Rusia, Sergei Shoigu, y al jefe del ejército en Ucrania, Valery Gerasimov, de incompetencia y de desabastecer deliberadamente a las unidades Wagner que luchan en Ucrania. Prigozhin prometió derrocar a los líderes militares rusos y la acusación de que el ejército ruso lanzó un mortal ataque con misiles contra las tropas de Wagner parece haber sido el detonante de esta rebelión.
¿Cómo está reaccionando el mundo a esta situación?
El presidente de EE.UU., Joe Biden, está al tanto de las noticias que llegan desde Rusia. La situación en Rusia está en constante evolución y el mundo está observando con atención.
¿Cuáles son las posibles consecuencias de esta rebelión?
Las luchas internas en Rusia han escalado significativamente con esta rebelión y las consecuencias son imprevisibles en este momento.
Sobre el Grupo Wagner
¿Qué es el Grupo Wagner?
El Grupo Wagner es una organización militar privada (OMP) que se cree que tiene su origen en Rusia. Aunque el gobierno ruso niega oficialmente cualquier vinculación con el grupo, hay informes y evidencias que sugieren que opera con el apoyo del estado ruso. Wagner ha estado activo en una serie de conflictos en todo el mundo, incluyendo Ucrania, Siria, Libia, y más recientemente en África.
¿Quién fundó el Grupo Wagner y cuándo?
El Grupo Wagner fue fundado por Dmitry Utkin, un ex oficial de las fuerzas especiales del GRU, la agencia de inteligencia militar de Rusia. La fundación del grupo se remonta a 2014, durante la crisis de Crimea.
¿Por qué el nombre “Wagner”?
El nombre “Wagner” proviene del alias de su fundador, Dmitry Utkin, quien supuestamente es un gran admirador de la obra del compositor alemán Richard Wagner.
¿Qué tipo de operaciones lleva a cabo el Grupo Wagner?
El Grupo Wagner ha estado involucrado en una serie de conflictos armados. A menudo se utilizan para tareas que el gobierno ruso prefiere no realizar directamente, como combatir en terreno en conflictos extranjeros. Esto ha incluido acciones en Ucrania, Siria y Libia, donde el grupo ha proporcionado apoyo militar a gobiernos o facciones aliadas con Rusia.
¿Cuál es la relación entre el Grupo Wagner y el gobierno ruso?
Aunque el gobierno ruso niega oficialmente cualquier conexión con el Grupo Wagner, hay pruebas que sugieren que el grupo opera con el apoyo del estado ruso. Las operaciones de Wagner suelen estar en línea con los intereses estratégicos de Rusia, y hay informes de que el grupo ha recibido apoyo logístico y material del ejército ruso.
¿Cuántos miembros tiene el Grupo Wagner?
Las estimaciones del tamaño del Grupo Wagner varían, pero los informes sugieren que podría tener varios miles de miembros. Dada la naturaleza encubierta de las operaciones de Wagner, es difícil obtener cifras exactas, pero se estima que cuenta con entre 25.000 y 50.000 activos.
¿Cómo se reclutan los miembros del Grupo Wagner?
Se cree que muchos miembros del Grupo Wagner son ex militares rusos. El grupo puede ofrecer salarios más altos que el servicio militar regular, y la posibilidad de luchar en conflictos internacionales puede atraer a aquellos con experiencia militar que buscan una nueva forma de empleo.
¿Cómo ha afectado la existencia del Grupo Wagner a la política internacional?
La existencia del Grupo Wagner ha complicado la política internacional. Su capacidad para operar en zonas de conflicto sin un reconocimiento oficial por parte del estado ruso ha llevado a acusaciones de que Rusia está utilizando a Wagner para llevar a cabo una “guerra híbrida”, que combina tácticas militares convencionales, guerra irregular y guerra cibernética.
¿Qué críticas se han hecho al Grupo Wagner?
El Grupo Wagner ha sido objeto de críticas por su falta de transparencia y responsabilidad. Se ha informado de que el grupo ha estado involucrado en violaciones de los
derechos humanos y se han informado de casos de abusos graves, incluyendo asesinatos extrajudiciales.
¿Cuál es la situación actual del Grupo Wagner?
Wagner afirma haber tomado el control de una instalación militar clave en la ciudad rusa de Rostov-on-Don y otra base en Voronezh. Algunas tropas de Wagner se informó que se estaban moviendo hacia la capital. Esta situación ha provocado una gran operación de seguridad en la región de Moscú, con un régimen antiterrorista siendo implementado según los funcionarios rusos.
En respuesta al discurso de Putin, Prigozhin dijo en Telegram que el presidente estaba “profundamente equivocado”. “Somos patriotas de nuestra Madre Patria, luchamos y estamos luchando”, dijo en mensajes de audio. “Y nadie se va a entregar a petición del presidente, el FSB (servicio de inteligencia interna de Rusia) o de cualquier otra persona”.
El jefe de Wagner afirmó que sus fuerzas tomaron la sede militar del sur de Rusia en la ciudad de Rostov-on-Don “sin disparar un solo tiro”, sugiriendo que “el país nos apoya”.
Mientras tanto, muchos altos funcionarios rusos se han apresurado a ponerse del lado de Putin. El funcionario de inteligencia ruso, el teniente general Vladimir Alekseev, describió las acciones de Prigozhin como un intento de golpe de estado. Sergei Naryshkin, jefe del Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia, describió los eventos como un “intento de rebelión armada”. El FSB también respondió instando a los combatientes de Wagner a detener a su líder y abriendo un caso criminal contra el jefe de la milicia acusándolo de “llamar a una rebelión armada”, reportó la cadena de noticias CNN.
Estos eventos han llevado a un cambio significativo en la percepción del Grupo Wagner y su papel en la política y los conflictos internacionales.
